La viralización de la intimidad femenina en Instagram

De a poco se viene convirtiendo en la mejor vitrina para ilustradores emergentes que encuentran en la mar de likes y seguidores un impulso a su carrera profesional.

Hace poco te contamos el caso de Idalia Candelas, la mexicana que dejó el diseño gráfico para dedicarse a la ilustración y se alzó con el reconocimiento de Grupo Planeta y la publicación de A solas, una novela gráfica que reivindica el disfrute de la soledad por parte de la mujer.

Navegando en Instagram, conseguimos a otra artista, nacida en Estados Unidos, que un día se propuso un reto personal: publicar una ilustración diaria hasta completar los 365 días del año. Sally Nixon lo hizo por puro placer de dibujar, hoy ese disfrute se traduce en 104K seguidores y un promedio de 3.000 likes por cada posteo.

Lo que llama la atención de este fenómeno es ese gusto viral por ser voyeur desde la distancia. Ese disfrute que genera observar la intimidad femenina, aunque sea en ilustraciones. Quizá porque la media general de mujeres sale de casa maquillada, en tacones, perfumada y, por supuesto, más que combinada. Entonces, en la oficina, en el transporte público, muchos se preguntarán ¿pero cómo serán en casa, cuando nadie las ve?

En varias entrevistas, Nixon ha revelado que su trabajo parte justamente de esa premisa: mostrar la cotidianidad femenina, desde una postura natural, libre de artilugios, desnuda de cualquier delineador de ojos. Y, si te pierdes en la mar visual de Sally comprobarás que sí es así.

Mujeres en el inodoro, con su perro al lado. Reunión de amigas, mucha pizza y papelitos en el suelo. Libros. Postales. Todo el color y toda la cotidianidad de una chica que le gusta dibujar en un pantallazo inagotable.

Algunos dirán que se trata de marca personal, otros más optimistas celebrarán que muchos artistas cumplan sueños, angelados por las redes sociales y sus efectos virales.

El Internet da para todo, es tu turno: ¿qué piensas a todas éstas?