Serie Venezuela: Los estudiantes
En estos 18 años de la era chavista-madurista, han sido pilares y voces de las protestas más importantes. Conocen la constitución, son líderes en sus comunidades y buscan el cambio. Se interesan y se involucran en la política y se han unido a partidos, tanto de oposición como del oficialismo, según sus tendencias. Conoce a los estudiantes venezolanos que luchan por el retorno de la verdadera democracia.
Los privados de libertad
Pareciera que para el régimen chavista-madurista, ser estudiante con un criterio diferente al del gobierno es un sinónimo de delincuencia. En las últimas protestas, la organización no gubernamental Foro Penal de Venezuela, reportó más de 4000 arrestos. De éstos, un número importante son estudiantes que ahora forman parte de la lista de presos políticos.
Madres lloran y denuncian que sus hijos (algunos menores de edad) han sido juzgados ilegalmente por tribunales militares, han sido encerrados en cárceles de alta peligrosidad y hacinamiento o han sido encerrados en centros de terror como “la tumba” en donde las más crueles torturas son practicadas.
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En este grupo de presos políticos no hay distinción entre hombres o mujeres. Se les ha imputado traición a la patria, ultraje al centinela y rebelión por manifestar en contra del régimen. El Foro Penal Venezolano reportó que “sólo en el gobierno de Maduro se detienen a mujeres como presos políticos. (El gobierno) se ha caracterizado por detención de mujeres y estudiantes”
Los que se van
La fuga de talentos ha sido una de las grandes pérdidas para el país en los últimos 15 años. Venezuela ha sido testigo del éxodo de estudiantes recién graduados en medicina, ingeniería, docencia, arquitectura, economía o cualquier profesión necesaria para un país. Al terminar su pregrado o postgrado buscan nuevos destinos en la región o el cualquier continente del mundo, con el sueño de iniciar una vida profesional que les prometa un futuro decente.
A este grupo de estudiantes se le suman ahora los bachilleres, enviados al exterior por el temor a la inseguridad, la inestabilidad social y política.