El reto de comenzar la universidad
Definitivamente no eres aquel niño tímido que recuerda con miedo el primer día de escuela. Ahora estás próximo a cumplir 18 años, pero el temor por otro gran paso también está presente: comienzas la universidad.
A ti te hace sentir ansioso, pero tu familia, con seguridad, lo asume como un gran acontecimiento porque se trata de la culminación de un gran esfuerzo realizado.
Para que lo enfrentes de la mejor manera posible te recomendamos que asistas a un programa de inducciones para los nuevos estudiantes. La mayoría de las universidades lo ofrecen para que la transición no sea traumática. Algunos jóvenes creen que es innecesario y fastidioso, pero puedes verlo como una herramienta que te ayudará a despejar dudas y a conocer gente.
También te permitirá conocer el espacio donde estudiarás antes de que comiences las clases. No hay nada más angustioso que estar perdido dentro del campus y no saber dónde se ubican las aulas.
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Procura buscar información sobre la universidad en la que comenzarás a estudiar. Cuándo se fundó, cuántas facultades hay, qué carreras ofrece. Trata de involucrarte con esa comunidad de la que formarás parte. Pregunta hasta lo que parezca obvio, eso te permitirá saber qué reclamos puedes hacer como alumno, cuáles son tus deberes. También es importante que sepas el reglamento interno, las fechas de los exámenes, de retiro de la materia entre otras cosas que consideres que puedan resultar útiles.
Eso, además, te ayudará a aprovecharla al máximo porque tendrás la información actualizada y pertinente sobre los servicios que brinda, actividades extracurriculares, instalaciones, oportunidades de becas, entre otros detalles que pueden ser de gran ayuda.
Evita faltar los primeros días porque son determinantes para el resto del semestre. Aunque te resulten aburridos o lentos, es en ese momento cuando se realizan las presentaciones de docentes y cursos, y no es recomendable que te ausentes. Allí conocerás los métodos de evaluación, la información de biblioteca y de la intranet universitaria, etc.
Durante los primeros días es cuando más gente conocerás y el momento en que se forman los grupos de nuevos amigos y compañeros de estudio. Si faltas es probable que al comenzar a ir te sientas un poco aislado.
Desde el principio organiza tus días en función de las clases, deja tiempo para el estudio, las tareas, la recreación y el descanso. Para rendir bien es importante estar organizados para estudiar lo máximo posible cada día y estar bien preparados a la hora de enfrentarte a los exámenes.
No veas la universidad como un lugar solo para capacitarte profesionalmente, sino también como el sitio en el que podrás desarrollarte como persona. Asiste a las charlas, encuentros y jornadas culturales, deportivas y sociales que se organicen para que te sientas parte de la comunidad universitaria.
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Al comenzar la universidad conocerás estudiantes de distintas nacionalidades, razas, ideologías y religiones. Evita juzgarlos y trata de aprender de ellos lo máximo posible. Esto te enriquecerá como persona.
Entiende que la universidad ya no es la escuela y que las técnicas de estudio que usabas en los primeros años seguramente no te funcionarán a este nivel. Lo ideal es que pruebes varias técnicas de estudio y evalúa cuál te resulta más efectiva; hay quienes prefieren estudiar en grupo, pero a otros les basta con hacer resúmenes. Esto también depende de la carrera y las materias.
No te desesperes si no avanzas tanto como pensabas o si no logras conseguir una pasantía o un trabajo tan rápido como tus compañeros de clase. Son muchos los factores que influyen en este tipo de situaciones, con el paso del tiempo podrás lograr lo que te propongas.
