Gutenberg y la Imprenta
Antes de la aparición de la imprenta moderna en el siglo XV, hay evidencias de que los romanos 400 años a.C. hacían reproducciones con moldes de arcilla y que los chinos en el siglo XI las hacían con tipos móviles de porcelana dispuestos en filas e imprimían sobre papel de arroz. En Europa, durante la Baja Edad Media (años 1100 1400), utilizaron la xilografía para reproducir panfletos y otros escritos. Para ello, un artesano grababa las palabras o dibujos que se iban a reproducir en una tabla o madera. Era un trabajo muy laborioso, lento, si ocurría desgaste de algún sector o una equivocación en el contenido se tenía que repetir el molde completo. Todo eso hacía que el proceso fuera muy costoso, resultando libros muy caros que solo la gente adinerada podía adquirir.
Se establece que en 1448, Johannes Gutenberg nacido en Maguncia, Alemania, el año 1399, inventó la imprenta, representando uno de los grandes avances en la historia de la humanidad, ya que hizo posible que cualquier persona pudiera tener acceso a los libros y tener la capacidad de acumular conocimientos, a lo cual solo los ricos habían tenido acceso. Su invento mejoró la impresión de libros a gran escala, ya que antes se producían realizando copias manuscritas, generalmente por monjes, siendo un trabajo lento, arduo y costoso.
Gutenberg perfeccionó las técnicas de impresión existentes hasta ese momento, fundió en metal cada letra del alfabeto por separado, con un sistema para ponerlas una a continuación de otra formando palabras, con lo cual se aceleraba el proceso y los moldes o tipos se podían reutilizar para organizar otras páginas. Hasta este momento, los dibujos se seguían haciendo con xilografía y luego se pintaban a mano.
En un principio, Gutenberg trabajó como herrero en el obispado de Maguncia y residió como platero en Estrasburgo, adquiriendo conocimientos y experiencias en la fundición de metales, lo cual le fue de utilidad para producir sus tipos de letras. En Maguncia se asoció con Johann Fust, quien le concedió un préstamo para desarrollar su invento y en 1449 publicaron el “Misal de Constanza”, que se considera el primer libro impreso con tipos móviles en occidente.
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En 1452 se marca la Edad de la Imprenta con el inicio de la impresión de la “Biblia de 42 Líneas” o “Biblia de Gutenberg”. Para 1455, Gutenberg estaba cerca de terminar un compromiso de 150 biblias, Fust no le amplía el crédito y se queda con los derechos del negocio. Peter Schöffer, sobrino de Fust, quien fue aprendiz de Gutenberg y aprendió todos los secretos del invento de la imprenta, quedó al frente de los trabajos. La Biblia de 42 Líneas se publicó en 1456 en dos tomos de 324 y 319 páginas, para un total de 643 páginas.
Johannes Gutenberg terminó arruinado y reveló su invento a otras imprentas. Falleció en 1468.
