Bucéfalo, el caballo de Alejandro Magno

Bucéfalo, el caballo de Alejandro Magno

Bucéfalo, el caballo de Alejandro Magno

La historia nos presenta varios caballos famosos en la antigüedad, uno de ellos, para muchos el más famoso de todos, fue Bucéfalo, el caballo de Alejandro Magno, porque juntos conquistaron gran parte del mundo.

Bucéfalo fue de raza desconocida pero casi con seguridad era de origen oriental, de color negro intenso y de alzada no muy grande. Su nombre es derivado del griego y significa “cabeza de toro” (o de buey), y así fue apodado por tener la cara redondeada y la frente muy ancha, donde destacaba una mancha blanca en forma de estrella, aunque para algunos como Plinio el Viejo, esa mancha tenía forma de cabeza de toro y estaba en su espalda y no en la frente.

bucéfalo

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Según Plutarco, historiador griego, un tesalino de nombre Filónico llevó a Macedonia un hermoso caballo para venderlo al Rey Filipo II por trece talentos. Llevaron el caballo al descampado para probarlo y se mostró muy indócil y nadie pudo montarlo. Ante esa situación el rey ordenó que se lo llevaran, pero el joven Alejandro, el hijo del Rey Filipo II, pidió que lo dejaran intentar domar aquel especial caballo. Todos quedaron sorprendidos y hasta rieron de la osadía del joven, pero éste se había dado cuenta que Bucéfalo tenía miedo de su sombra y por eso se alteraba tanto. Entonces tomó las riendas y orientó la cara del animal hacia el sol logrando encandilarlo, luego lo acarició y lo montó de un solo brinco, le aflojó la rienda y se fueron a paso lento. El rey lloró de emoción, y cuando Alejandro bajó del caballo lo besó en la cabeza y le dijo la famosa y premonitoria frase: “hijo, busca un reino que se iguale a tu grandeza porque Macedonia es pequeña para ti”.

Hay otras versiones en relación a la historia de Bucéfalo, pero quizás la de Plutarco sea la más aceptada de todas. Se dice que este caballo no se dejó montar por más nadie que por Alejandro, lo acompañó durante toda su campaña por Asia contra el Imperio Aqueménida y se reseña que murió a los 30 años durante la batalla de Hidaspas el año 326 a.C. La muerte de su caballo afectó tan profundamente a Alejandro Magno que ordenó que fundaran una ciudad cerca de la tumba de Bucéfalo a la que llamó Alejandría Bucefalia, y se cree que este sitio se localiza frente al actual pueblo de Jhelum, provincia de Panyal al noroeste de Pakistán.


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