La somatización: la epidemia del espíritu
¿Sabías que la ira, el odio, la envidia, la depresión, el rencor, el miedo, la pérdida de autoestima, la falta de ilusión en la vida, son potencialmente fuentes de enfermedad que producen reacciones bioquímicas en nuestro organismo que alteran la homeóstasis?
Las enfermedades del alma se manifiestan en el cuerpo físico. Hoy en día vivimos una verdadera epidemia del espíritu
Hipócrates, considerado el padre de la medicina, afirmaba que el buen funcionamiento del cuerpo depende de que se encuentre en un estado armónico, que se refiere al estado de ánimo y su influencia en las enfermedades padecidas por el individuo.
Anuncio
Quién no ha escuchado aquella frase que dice, “el cuerpo es el reflejo del alma"
Estudios han señalado la muy asertiva relación entre los dolores que padecemos y las emociones, y el sufrimiento físico nos da idea de cuál es la carga que llevamos en nuestra cabeza.
La somatización consiste en la aparición de síntomas físicos como dolor de cabeza y abdomen, vómito, cansancio, depresión constante y hasta la pérdida del deseo sexual que interfieren en la vida social y laboral del individuo, que según expertos, se debe a la ansiedad ocasionada por estrés o problemas emocionales.
Se dice que las molestias en el cuello a veces ocurren por ser inflexibles, como si no quisiéramos ver otros puntos de vista. Las molestias en los hombros por manifestar una actitud negativa. En la columna, en la parte superior, causados por un sentimiento de falta de amor, en la zona media, reflejado por sentimientos de culpa y en la zona inferior, por miedo sobre el dinero.
Las señales de somatización reflejan una manera de pedir atención, el deseo de ser atendidos en todos los aspectos de su existencia. Algo muy característico es que estas personas van de un especialista a otro buscando alguna solución y presionando para ser sometidos a tratamientos médicos, sin querer reconocer que su problema es psicológico.
La mejor terapia consiste en una relación médico-paciente relajada, donde el especialista ofrezca alivio sintomático y tratamiento farmacológico para la ansiedad y la depresión, aunque esto no reduzca la necesidad de estar enfermo, pero ayuda al paciente a controlarse y evitar procedimientos más costosos sin necesidad alguna.
Anuncio
Sin embargo la solución sería tomar conciencia de quiénes somos y reconocer que somos responsables de nuestra salud para llevar una vida de plenitud desde la autenticidad de nuestra conciencia. Sin un orden emocional no puede existir un equilibrio estructural.
