Gabriela Mistral: poetisa de Montegrande
Gabriela Mistral fue el seudónimo literario que utilizó Lucila de María del Perpetuo Socorro Godoy Alcayaga, o Lucila Godoy, o Lucila Alcayaga, a partir del año 1914 cuando ganó el concurso literario Los juegos Florales de ese año por sus Sonetos de la Muerte. Su seudónimo lo creó como homenaje a dos de sus poetas favoritos, el italiano Gabriele D´Annunzio, y el francés Frederic Mistral, ganador del Premio Nobel de Literatura de 1904.
Lucila Godoy nació en Vicuña, Chile, el año 1889 y murió a los 67 años de edad en Nueva York; sin embargo, su “amado pueblo” como solía llamarlo fue Montegrande, donde vivió desde los tres hasta los nueve años y donde pidió ser sepultada. Su mudanza hacia Montegrande fue acompañada del abandono del hogar por parte de su padre, y a pesar de su edad infantil, Lucila siempre quiso y defendió a su padre. Ella relataba que en una oportunidad, revisando papeles en su casa, encontró unos versos de su padre muy bonitos y apuntaba: “esos versos de mi padre, los primeros que leí, despertaron mi pasión poética”.
Su primer amor, platónico, fue con un rico chileno llamado Alfredo Videla, quien era veinte años mayor que ella. A los 20 años de edad conoció e hizo amistad con un empleado de la empresa ferrocarrilera, Romelio Ureta, quien a raíz de un problema financiero se suicidó, y al triunfar Lucila en Los juegos Florales de 1914, relacionaron sus Sonetos de la Muerte con el suicida y nació el mito de un gran amor entre ambos.
Anuncio
Desde muy joven, en 1904, comenzó a trabajar en la enseñanza primaria como ayudante en una escuela en La Serena. Luego, desde 1908, fue maestra en La Cantera, después en Los Cerrillos, y aunque no estudió para maestra por falta de recursos, en 1910 convalidó sus conocimientos ante la Escuela Normal N°1 de Santiago, obteniendo el título oficial de “Profesora de Estado”. Esto fue motivo de rivalidad en sus colegas ya que no asistió nunca al Instituto Pedagógico de la Universidad de Chile. Ese mismo año comenzó como profesora en el Liceo de Niñas de Traiguén, y allí inició un recorrido de once años dedicada a la enseñanza chilena en Antofagasta, Los Andes, Punta Arenas, Temuco y Santiago.
Hasta su llegada a Traiguén, Lucila básicamente escribió artículos de prensa y allí comienza a dedicarse a la poesía que es una de sus mayores realizaciones personales. Ya para 1917 se publica la importante antología poética de Chile Selva Lírica, y Lucila Godoy se convierte en una de las grandes poetisas chilenas. En 1922 publica Desolación, en 1923 publica el libro Lectura para mujeres y aparece en España la antología Las Mejores Poesías. En 1924 publica Ternura que es poesía escolar. A partir de esta etapa, su estilo errante que vivió en Chile lo lleva hacia otros países, y prácticamente comienza a vivir entre América y Europa. Desde 1933 y por veinte años fue cónsul de Chile en ciudades de esos dos continentes, y en 1945 recibe la noticia de haber ganado el Premio Nobel de Literatura, estando de cónsul en la ciudad brasileña Petrópolis. A partir de allí, se estableció en los Estados Unidos de América donde murió en 1957.
