Antiperspirantes y cáncer de senos
Muchos de los antiperspirantes que se aplican en las axilas contienen como ingrediente activo clorhidrato de aluminio. Desde los años cincuenta, el aluminio fue muy popular en la fabricación de ollas y otros utensilios de cocina y se ha creado una gran controversia en cuanto a la contribución de este elemento en el desarrollo de Alzheimer, y ahora también se le relaciona con el cáncer de senos.
Investigaciones han mostrado que una de las causas de cáncer de senos pudiera ser el uso de antiperspirantes. El cuerpo humano tiene sitios específicos para eliminar toxinas como son detrás de las rodillas, detrás de las orejas, la ingle y las axilas. Estas toxinas se eliminan con el sudor, y los antiperspirantes, como su nombre lo indica, previenen la sudoración evitando que el cuerpo elimine las toxinas por las axilas. Estas toxinas no desaparecen sino que el cuerpo las deposita en los nudos linfáticos debajo de los brazos ya que allí no hay salida del sudor. Consecuentemente se eleva la concentración de toxinas en áreas como las axilas, lo cual puede conducir a mutaciones de las células, lo cual pudiera ser cáncer.
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No se puede ignorar que casi todos los tumores de cáncer de senos ocurren en el primer cuadrante superior del área de los senos, que es donde se localizan los nudos linfáticos. Es menos probable que este tipo de cáncer ocurra en hombres, porque buena parte del antitranspirante puede quedar atrapado en esa zona pilosa de las axilas, que las mujeres normalmente se afeitan, favoreciendo que esos químicos penetren más fácilmente en el cuerpo.
La mejor solución es usar desodorantes en lugar de antiperspirantes, decisión que queda bajo la responsabilidad de cada quien debido a lo controversial de este tema.
